Eremitorios y necrópolis


Esta forma de vida que irradiaba cierto carisma, atrajo a numerosos jóvenes, y los asentamientos eremitas fueron notables en este territorio.

Se piensa que desde el s. VIII hasta el XI, llegó a la Sierra de la Demanda la cultura eremita para instalarse en lugares recónditos, alejados de lo material y en soledad, en búsqueda de la espiritualidad. Silencio, oración, penitencia y trabajo eran las normas de conducta de los ascetas, que elegían para sus asentamientos cuevas excavadas en la roca (o las excavaban ellos mismos).

Humedal de Fuentepeña

Este humedal formado por diez lagunas es el resultado de la restauración de un espacio a punto de perderse por colmatación.

Árboles fósiles

Los bosques del Cretácico, hace 120 millones de años, estaban formados por frondosos helechos y coníferas.

Santo Domingo de Silos

Hay que contener la respiración para llegar a la obra arquitectónica más aplaudida del arte medieval europeo.

El conjunto de eremitorios y necrópolis del Alto Arlanza representa un buen ejemplo del éxito de esta corriente espiritual, que posteriormente ejerció de nodo sociopolítico para el impulso de la reconquista.

Información práctica: Se puede visitar el eremitorio de Peña Rota, con 13 cuevas excavadas en la roca, a 200 metros del casco urbano de Salas de los Infantes (saliendo dirección Pineda de la Sierra, BU-825).

En Castrillo de la Reina destaca la ermita semirrupestre de Santiuste y la necrópolis de Saelices, la Covacha de las Monjas (acceso también desde Moncalvillo) y la Ermita de Santa Ana.