La ermita mestiza de San Vicente del Valle
Si bien ha llegado hasta hoy convertida en ermita, esta construcción es mucho más enigmática.
Los expertos indican que la primera edificación fue romana o paleocristiana (anterior al s. IV), por las estelas funerarias y arcos de medio punto de las ventanas inferiores, propios de esta época.
Se trataría de una edificación de tipo civil, que entre los siglos VI y VIII fue aprovechada por los visigodos que reformaron la construcción y añadieron pinceladas de su cultura y arte, como los arcos de herradura en las ventanas superiores y cuatro capiteles sobre las ventanas gemelas.
Patrimonio industrial en Pradoluengo
Pradoluengo, un pueblo surgido del trasiego de productos lanares, llegó a convertirse en lugar de referencia del sector textil. Todo en esta villa recuerda a la lana.
El San Millán “a la carrera”
La carrera conocida como “Subida al San Millán” parte cada año de la localidad y propone un itinerario de vértigo por los elevados alrededores, culminando siempre el ascenso en el omnipresente San Millán.
Naturaleza en el Norte de la Sierra
La variedad de rutas en esta comarca es inmensa: caminos señalizados, rutas de cascadas, sin olvidar la subida a Pozo Negro.
Parece ser que entre los siglos s. IX y X, se transforma finalmente en iglesia de un monasterio. El ábside que hoy se conserva, la cúpula, y las decoraciones vegetales, son un legado mozárabe.
La última fase corresponde al románico: la espadaña y la puerta corresponden a este periodo. En definitiva, una estratigrafía en pie de la herencia histórica del valle que merece una visita.
Orientación nordeste
Este origen civil explicaría entre otras cosas la singular orientación nordeste de la cabecera, su estructura en una sola nave y su gran tamaño.